A lo largo del día, la energía que tenemos para realizar actividades fluctúa. Hay momentos en los que es más necesaria, pero no siempre la podemos  encontrar automáticamente, en muchas situaciones la motivación es importante descubrirla. ante la falta de ganas.

Al igual que existen herramientas para entrenarnos en situaciones de malestar, también es importante encontrar lo que necesito, y si el motivo es descubrir la fuerza suficiente para llevar a cabo una actividad, quizás los siguientes consejos psicológicos te resulten de gran ayuda para lanzarte al día a día.

Aspectos claves a la hora de gestionar la falta de energía

El ser humano es social por naturaleza.  Si a lo largo del día me meto únicamente en las actividades que requieren concentración, trabajo, etc, y dejo de lado las relaciones sociales, la sensación de placer y disfrute se puede ver deteriorada, lo que genera una disminución en la motivación. Ser capaz de vivir una vida social plena, o interaccionar con otras personas de forma libre e intermitente (cada cierto tiempo, fuera del entorno laboral), ayuda a desconectar de las tareas que generan una sobredemanda y estrés.

Reconocimiento del  esfuerzo personal y merecerse el derecho a un descanso. El autoreconocimiento del esfuerzo desempeñado durante el día, y la realización de tareas, genera un fuerte salto motivacional en esa falta de energía. Una persona que en su día observa cada pequeño detalle del esfuerzo puesto en una tarea y se lo reconoce, es capaz de sentirse mejor y de aumentar la confianza en sí misma. Esto genera un fuerte aumento momentáneo de la autoestima y energía, lo que ayuda a desempeñar la tarea que viene por delante con más serenidad y con un menor gasto.

Conocer de antemano los beneficios de realizar ese sobreesfuerzo. Poder ver los resultados positivos de nuestra acción conlleva una liberación. Si una persona antes de realizar una difícil tarea, sin ganas, es capaz de ver los beneficios que lleva el hacerla además de los resultados positivos, será capaz de ponerle más ganas enfocadas a conseguir el fin: dejarla hecha. Ser capaz de ver los beneficios que llevan las cosas ayuda a aumentar la autoconfianza y la motivación asociada ante la falta.

Encontrar la motivación es importante, aunque hay veces que no se puede.

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Uno de los aspectos más importantes para encontrar energía, es dedicar unos minutos a pensar, y no reaccionar automáticamente ante la sensación de malestar. Hay veces que el esfuerzo diario y el cansancio son tan fuertes que la parte emocional se ve implicada, y es por eso que resulta aún más importante detectarnos para no malgastar esas fuerzas y no realizar la tarea con resignación. Es cierto, hay veces que hacer algo resulta cansado y agotador, pero incluso en ese cansancio y ante una demanda que no podemos aplazar, encontrar las fuerzas necesarias resulta de especial necesidad, sabiendo que al final, un trabajo o esfuerzo valorado por mí puede resultar de lo más gratificante.

Tener que achicar el agua de un bote de remos que hace agua desvía la energía que debería utilizarse para remar. «Organízate con eficacia« (2001), David Allen

 

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